La historia de este título fue escrita por R.A. Salvatore, escritor de mundo de fantasías sumamente espectaculares, y fue desarrollado por el creador de Spawn, nada menos que Todd McFarlane junto al jefe de diseño de Elder Scrolls IV: Oblivion, Ken Rolston.

Pero te preguntaras como es que un juego con tantas mentes brillantes ha pasado desapercibido, y una de las causas es porque el mismo año se publicó un juego algo similar, llamado The Elder Scrolls V: Skyrim.

En este mundo de fantasía vamos a poder personalizar a nuestro héroe, eligiendo entre cuatro razas, dependiendo de la clase tendremos habilidades o atributos predeterminados, aunque luego podremos cambiarlos a gusto nuestro. 

Sin ir más lejos ya te conté gran parte de la historia de nuestro héroe, somos una entidad que literalmente revive de las cenizas, con un único fin. Objetivo que no es revelado, ya que vamos a poder moldearlo nuestro destino como nosotros queramos. Tenemos tres caminos para elegir; Poder, ser un guerrero con gran habilidad para cualquier tipo de armas, utilizando su fuerza para avasallar a los rivales. Pericia, hábil en sigilo y con armas rápidas, dagas o arcos de flechas. Magia, priorizando el uso del mana creando hechizos devastadores para los enemigos. Si a mitad de nuestro progreso queremos cambiar nuestro estilo de pelea lo vamos a poder hacer sin ningún tipo de penalización.

Es tanta la libertad que tenemos en este juego, que es muy fácil perder el hilo conductor de la historia, apenas arrancamos nuestra aventura nos van ofrecer misiones principales como secundarias. Y estas segundas van a liberar a mas secundarias, que cuando te das cuenta estuviste horas haciendo misiones que no tienen ningún tipo de relación con la historia principal. Pero no lo tomemos como un punto negativo, ya que como cualquier RPG tiene ese factor de adicción que logra muy fácil la dispersión por un mundo enorme queriendo adquirir más experiencia para desbloquear más habilidades. Si solamente nos basamos en la historia principal el juego nos tomara alrededor de unas veinte horas, aunque si decidimos hacer también las secundarias nos puede llegar a tomar alrededor de más de 70 horas.

Hablando un poco de gameplay, si bien es un RPG de acción, toma el estilo de pelea de un hack and slash, tendremos un botón para esquivar golpes y otro con el cual nos vamos a poder cubrir con un escudo. A la vez vamos a poder concatenar golpes físicos junto con poderes, formando así largas cadenas de combo que nos darán puntos que servirán para rellenar la barra de una habilidad especial. Una vez completada esta barra pondremos el mundo en slow, lo cual nos da la ventaja para atacar, y al derrotar al grupo de enemigos, se nos pondrá a disposición un ataque final. 

El problema que se genera al haber tanta facilidad, es que no existe un desafío interesante a la hora de pelear, debido a que la inteligencia artificial no es muy competente, a tal punto que los jefes finales, no son jefes.

Port de Switch.

El port de Switch tiene sus bondades y sus desventajas, por ejemplo trae todas las armaduras extras y contenido que en PC. ¿Pero qué sucede con el apartado gráfico? Bueno los gráficos no son pobres, pero  están a la altura de la generación anterior, lo que significa un downgrade importante en esta versión. 

Sin embargo esto es compensado por el modo port que nos brinda la Switch. Y les aseguro que  en este modo se ve maravilloso. Despues, el juego corre a 30 FPS, si, no esperen mucho más. Aunque esto casi ni se nota.

Es un contraste difícil pero al mismo tiempo arriesgado. De todas formas a un buen precio es una opción más que conveniente. 

Algo que no se puede aceptar en estos tiempos son los tiempos de carga extensos. Cada vez que pasemos de una pantalla a otra tienen un tiempo de carga alto, y es lógico porque cada escenario del exterior es enorme y están muy bien detallado. Pero lo que no es lógico es que el tiempo de carga sea el mismo para cuando entramos a una simple casa. Y esto en el juego lo vamos hacer muchas veces ya que vamos a estar recorriendo muchas locaciones. Los tiempos de carga extensos generan perdida de la inversión que logra el jugador con el juego. 

Algo no muy logrado también es la banda sonora, si bien cada región tiene su ambientación junto con su estilo, después de estar un rato recorriendo el escenario es como si no estuviera ahí. A tal punto que lo único que vamos a escuchar son los golpes de nuestras armas y el desgarro de los enemigos. Solamente se hace presente la banda sonora cuando hay una escena puntual de la historia y está muy bien logrado pero se extraña que no esté en el resto del juego. Vos te estarás preguntando vale la pena darle otra oportunidad a un remasterización. La respuesta es: vale cada bendito centava sino mira todo lo que podes hacer; recorrer pueblos, mazmorras, secretos, hacer misiones de todo tipo , sistemas de facciones, gremios , alquimia, herrería, instrucciones, sigilo , robo, podremos ir a prisión, reparar y mejorar objetos, abrir cerradoras con ganzúas, comprar casas, reformarlas, setenta y cinco capacidades diferentes para mejorar según subamos de nivel…. 

Conclusión: A primera impresión su estilo cartoon, similar a Fable nos puede llegar a generar un poco de rechazo pero a medida que vamos avanzando nos damos cuenta que estamos ante un RPG muy elaborado y con un lore exquisito. Si sos amante de los mundos de rol este juego tiene que ser una compra obligatoria.

Lo mejor: -Gameplay -Horas de juego. Modo portátil en Switch

Lo peor: -Banda sonora -Tiempos de carga

Nota Final: 8 

Redaction: Joel Aguilozi y Rodrigo Gallardo.

Codígo obtenido gracias a la gentileza de THQ Nordic.